Nunca es tarde para dar un giro a la situación, para dejar atrás el pasado y mirar con decisión a un futuro mejor. Esta es una de las máximas que tiene el proyecto Nazaret, una entidad con más de 50 años que nace para dar respuesta a los menores con problemas de exclusión social en Alicante. Desde esa fecha Nazaret se ha ido configurando en unas estructuras de atención educativa concretas: pisos de acogida para menores en desamparo, programas de familia y programas de juventud y el colegio CAES, Centro de Actuación Educativa Singular.

Actualmente el proyecto de Pisos de Acogida cuenta con más de una treintena de jóvenes de etnia gitana repartidos en los diferentes pisos donde los chicos tratan de iniciar una nueva vida. “Los chicos que están aquí no están por ellos, la problemática viene de fuera” apunta Arantza Yagüe, responsable del programa de Inserción socio-laboral de Nazaret.

La labor de Nazaret en este proyecto consiste en garantizar y respetar los derechos de los jóvenes (alimentación, educación, salud…) y trabajar con los chicos para que pasen el menor tiempo posible en los Pisos de Acogida, regresando con sus familias o buscando otras alternativas si esto no fuera posible (como acogimientos familiares u otros recursos).

El trabajo, sin embargo, va más allá de los jóvenes según confirma Arantza: “No podemos pensar en que los niños estudien si no han comido, o no han dormido. Para nosotros es incluso más importante el cubrir sus necesidades de afecto que la educación”, explica el director Leoncio Calvo. “Son niños que vienen con la etiqueta de gitanos y nosotros no les juzgamos. Están acostumbrados al grito y la amenaza, viven prácticamente en la calle, y aquí tratamos de prepararles para la vida. Nuestra filosofía es llegar a lo que nadie llega”, añade Arantza.

En 1957 comenzó su andadura con 32 niños; a día de hoy, Nazaret atiende a más de 170 jóvenes con programas dirigidos tanto a ellos como a sus familias, por lo que el trabajo también se realiza con los familiares de estos jóvenes.

Desde la Fundación Esperanza Pertusa nos sentimos comprometidos con el trabajo de Nazaret y es por ello que colaboramos con el proyecto de casas de acogida para menores en situación de exclusión social. Además, el vínculo entre nuestra Fundación y la entidad va más allá con la realización de proyectos conjuntos, como el voluntariado corporativo que se llevará a cabo a finales del mes de mayo de 2017.